Para colgar en la pared

Ya he comentado en este blog alguna frase increíble: unión de fondo y forma, mensaje poderoso y pegadizo, etc. Aquí va otra, relativamente conocida. Ahí va: "Que tu vida no sea una vida estéril. Sé útil, deja poso." Y sigue, y sube a un plano superior. Me quedo hoy en éste. Haz algo con tu vida. Saca provecho a tus talentos. Muévete. Actúa. No pases por el mundo como si fueras una planta. O peor que ellas, que por lo menos dan sombra y, algunas, frutos agradables. Deja marca. Aporta algo. No te quejes por quejarte. Di la tuya. Piénsala un poco, antes. No te dejes paralizar por el miedo.
Es un punto de "Camino", el primero. Es un buen soplo de aire fresco en estas épocas en las que a los
jóvenes se les trata como a los muebles. O peor. Pongo este post hoy porque he estado visitando las cavas de Codorníu y, como se verá en la foto, he visto con mis ojos qué es "dejar poso".

 Es, en este sentido, un contraejemplo, porque conviene tirarlo a la hora de elaborar el cava. En otros sentidos, es buena imagen: se tarda lo suyo en generarlo.

(Sobre "Camino", me remito a lo que de él se dice en www.escrivaobras.org: "Camino, fruto de la labor sacerdotal que san Josemaría Escrivá había iniciado en 1925, aparece por primera vez en 1934 (en Cuenca, España. Sí: ¡Cuenca existe!) con el título de "Consideraciones Espirituales". En la edición siguiente -realizada en Valencia en 1939-, el libro, notablemente ampliado, recibe ya su título definitivo. Desde entonces se ha difundido con un ritmo sostenido y progresivo. Actualmente, se han publicado de Camino cerca de 4.500.000 ejemplares en 43 idiomas.")

Comentarios