Que no salga la antena...

He pasado el fin de semana en una casa en Collserola, con las vistas que eso implica. Desde una de las ventanas hicimos, hace unos meses, una foto del paisaje para que nos lo pintaran en un cuadro inmenso. Ahora preside la sala de estar. El resultado final es más que satisfactorio. Es impactante, por el tamaño y los colores y demás. Pero ayer, de nuevo en la casa de campo, me asomé a la ventana y vi que faltaba un detalle: una torre con su correspondiente tendido eléctrico. Un mazacote. Al lado izquierdo de la mirada panorámica.
-Habilidad del pintor, que la quitó: en ese paisaje seguro que queda como un pegote.
Ciertamente. Eso mismo me hizo pensar en que es una tentación común en nuestras vidas: "que no salga la antena, que desgracia el cuadro". Pero es que hay antena: la torre de acero con sus horribles cables que destrozan la belleza... está ahí: es verdad. Son parte del hermoso paisaje.
Creo que no hace falta deshacer la metáfora para entenderla. Las sombras son parte del cuadro. Que le pregunten a Caravaggio.

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