El Papa retrógrada y los periodistas progresistas

He podido escuchar en RAC 1 un desaforado debate ( no sé por qué creo que engancha la palabra ) sobre la visita del Papa a Barcelona.
He pasado vergüenza ajena por el hombre que gritaba tonterías sobre Benedicto XVI: "para el cual la mujer es carne de infierno". Me parece una grave irreponsabilidad decir eso. Supongo que no le habrá oído hablar mucho de las mujeres; o de que nombró a Flaminia Giovanelli como Subsecretaria del Pontificio Consejo Justicia y Paz, la primera mujer en ocupar esta posición en este dicasterio. No sé, además, qué tiene eso de progresista. Añadía, pobre, algún gruñido sobre que los homosexuales no caben en la Iglesia.Seguramente no ha leído ni una mísera letra sobre la pastoral que desempeñan, sin cobrar, muchos sacerdotes con quienes no están a gusto siendo homosexuales, que los hay.
Y todo ese griterío, en nombre del progresismo. De un progresismo barato y sin sentido. ¿No será que el retrógrada es quien sigue empecinado desde sus años mozos en que el Papa es retrógrada, y lo sostiene sin haber leído una sola línea, ni haber escuchado un solo discurso? Para mí está claro: no hay peor ciego que quien no quiere ver. Cuando en sus mentes retorcidas le den oportunidad de dejar de ser retrógrada, verán que no lo es.

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