Este va a ser un escrito peculiar.
Me han hecho una entrevista. En junio. Y salió ayer a la luz.
Toda una experiencia y un reto que agradezco.
—Pero tú tenías una web, ¿no?
—Sí, es esta que estás leyendo. Escribo.
—¿De qué va?
Y ahí podemos responder con la fotografía.
De esos diez grandes temas, y de muchos más. Me hace ilusión que haya salido así. Refleja bien los intereses. No sé si alguien ha señalado alguna vez algo como que "dime de qué escribes y te diré quién eres", pero podría ser una buena idea
—¿Y la entrevista?
La entrevista es algo parecido a este escrito: enunciar —sin tiempo a desarrollar demasiado— algunas ideas muy interesantes y que dan para mucho. Son las exigencias del formato de esta entrevista en concreto: se busca abrir melones. Otras, son monotemáticas, preparadísimas y exhaustivas por profundas. Son una masterclass. Una delicia. Yo he visto algunas. Me viene a la cabeza Celibidace, ese gran compositor.
Y luego hay otros formatos de exposición de temas. Aquí, en la web y en los libros —por escrito—, da más tiempo de razonar. Y de citar libros que sí profundizan. Y de pensar y buscar los datos que, en directo, a uno no le vienen. Y de retocar esa frase, que no dice lo que querías, sino casi todo lo contrario. Y de acabar las frases y no irse por las ramas (eso ya me lo decía mi primer jefe, Juanjo Martínez: un crack). De hacerlo mejor. Otro día será, tal vez.
A algunos les ha parecido que sirve como ejemplo de quien mucho abarca, poco aprieta. Y estoy de acuerdo, aunque me remito a lo dicho arriba sobre el formato. Y me parece que muestra que todos buscamos comprender el mundo a fondo, lo cual es fabuloso.
A otros les ha parecido todo maravilloso. Incluso me han escrito con mensajes muy cariñosos: es algo que les agradezco. Gracias a Dios.
A otros, todo fatal. O una parte, porque tenían prisa. O porque se les hizo larga e incomprensible. Por lo que fuera.
A otros, una mezcla. Mi madre me ha comentado cosas muy interesantes, que ya he aplicado y comentado arriba.
Diría que entiendo esas posturas tan diferentes. Y me alegro de lo positivo y lamento lo malo, caray. Valoro ahora más todavía los vídeos de gente que es experta en su tema y lo explica con calma y gran perfección formal: ¡qué difícil es! (Lo que me gusta a mí es dar clases: hacer hablar a los alumnos)
¡He aprendido y le agradezco al equipo de A la de tres la oportunidad!
Dios quiera que sirva para algo bueno.
Comentarios