aC y dC (antes y después de Cristo)

Ya no es lo mismo.
Hace unos 2000 -para qué discutir los más y menos- años nació. 
Navidad, natividad, nacimiento. Dios se hace hombre -así de fuerte lo dicen varios padres de la Iglesia- para que el hombre se haga como Dios. Y así reajustar el desbarajuste de los que quisieron ser como dioses.
Ya nada es lo mismo. Qué va.
A pesar de los pesares.
Jesús lo cambió todo. Hasta el calendario.
Se inauguró una nueva era.
Y me alegro de que el Papa (los últimos que hemos tenido, impecables todos) esté una y otra vez en las raíces: es lo que la gente espera, lo que necesita, lo que echa de menos. Por eso el Verbo se hizo carne: la teoría se encarnó, se hizo imitable al 100%, pasó por todos nuestros caminos, se las sabe todas: nos sabe del todo.
Y vino y se quedó, porque se hizo pan. Muy humano, el pan. Muy divino, ese Pan.
¡Feliz Navidad y próspero 2014!
¡Y que pase lo que Dios quiera, de verdad!

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